Hola!!
Diciembre es y ha sido sin duda el mes de mayor ilusión para mi. Ya que es tiempo de compartir, de dar y recibir regalos, la carta de los Reyes Magos, amigos invisibles y sobre todo mucha mucha ilusión.
Como cada año hice una de las cosas que más me gusta por estas fechas…, pasear por el centro de Sevilla, mirando sin perder detalle: la decoración navideña de sus calles y comercios con miles de luces, el Ayuntamiento y su tradicional Belén, La plaza de la Encarnación donde se podían disfrutar de atracciones para los niños, artesanía, gastronomía, talleres, espectáculos, cuentacuentos…
En la Plaza de San Francisco de Sevilla pude ver un gran espectáculo de luz y sonido que se proyectó sobre la fachada del Ayuntamiento, creando asombrosos efectos de formas e ilusiones ópticas.
Este año el contenido del mapping estuvo inspirado especialmente en el agua, el río Guadalquivir y el Puerto de Sevilla.
Para mi, Sevilla es la ciudad perfecta para sentir toda la magia de una fiesta que se comparte con la gente.
Después del paseo siempre acabo igual, tomando un café bien caliente con algún que otro dulce en la mítica Confitería La Campana. Es un local precioso, decorado con gusto y estilo, donde los detalles están muy cuidados. Además, todas sus exquisiteces son elaboradas artesanalmente. Entre sus especialidades destacan los polvorones, los merengues y las yemas sevillanas. También disponen de cortadillos, pastas de té, turrones, tartas, helados, caramelos, bombones…
Y allí, entre villancicos, café, rodeada de dulces y polvorones y como no luces de colores, cada año, por muchos que vayan pasando, vuelvo a sentirme especial y con una gran ilusión.
La Magia de la Navidad es la magia de las personas…




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